Tensa calma impera en París, el epicentro de las violentas manifestaciones, pero un bombero murió cuando apagaba un incendio y la Policía continúa con las detenciones para contener posibles nuevos brotes de violencia, tras una semana de manifestaciones que han dejado más de mil millones de euros en pérdidas.
Ante esta situación, 220 alcaldes se reunieron con representantes del presidente Emmanuel Macron, a quien le invocaron detener el vandalismo.
Representantes de todos los grupos políticos del Parlamento y varios ministros, así como alcaldes, fueron convocados a conversaciones con la primera ministra francesa, Elizabeth Borne, con la finalidad de buscar urgentes respuestas a la semana de violencia y destrucción tras la muerte del adolescente Nahel, de 17 años, a manos de un agente de policía la semana pasada en Nanterre.
De otro lado, un bombero que trabajaba en la extinción de un incendio en un parking de la ciudad de Saint Denis, dejó de existir cuando intentaba extinguir las llamas, anunció el ministro de Interior, Gérald Darmanin.
Mientras tanto, continúan las detenciones y la noche del martes se registraron 72 más, con lo que la cifra total asciende a 3,500. La Policía realiza diversos operativos de inteligencia, incluso en horas de la noche, para arrestar a los azuzadores de la violencia.
Por su parte, dueños de negocios, dirigentes barriales y autoridades se unieron para marchar por las calles y exigir que pare la violencia, que ha dejado más de mil millones de euros en pérdidas.
El Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos logró una alianza con el estado de Nebraska para ampliar el espacio de detención para “extranjeros criminales” detenidos por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Esta es la tercera alianza estatal que ICE logra luego de las prisiones de “Alligator Alcatraz” en Miami y “Speedway Slammer” en Indiana y la nueva instalación será apodada como “Cornhusker”.
En la mayor ofensiva aérea desde el inicio de la guerra, en febrero del 2022, las fuerzas de Rusia lanzaron más de 500 misiles y drones contra Kiev, la capital de Ucrania, dejando al menos 23 heridos y causando gran destrucción e incendios en zonas urbanas.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, informó que las explosiones provocaron incendios, daños materiales y la caída de fragmentos de proyectiles en múltiples zonas residenciales. Agregó que 15 de los heridos fueron hospitalizados y otros cinco reciben atención ambulatoria.
Según Timur Tkachenko, jefe de la Administración Militar de la Ciudad de Kiev (KMVA), al menos 13 puntos de los distritos de Solomyanskyi, Svyatoshynskyi, Darnytskyi, Dniprovskyi y Shevchenkivskyi resultaron afectados. Agregó que entre los heridos se encuentran hombres y mujeres de entre 25 y 57 años, con lesiones como politraumatismos, quemaduras y heridas cortantes.
El ataque comenzó hacia las 21:30 horas (local) del jueves, e incluyó el uso de drones Shahed y misiles balísticos. Las defensas aéreas ucranianas fueron activadas repetidamente durante la noche.
En el distrito de Solomyanskyi, se registraron incendios en techos de edificios y vehículos incendiados en patios residenciales. En Darnytskyi cayeron fragmentos de drones. Algunos restos fueron hallados cerca de instituciones educativas y viviendas.
Estos ataques se producen luego de informarse de una charla que sostuvieron los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump, de Rusia, Vladimir Putin. Ayer, el mandatario de Ucrania, Vladímir Zelensky, dijo haber acordado con Trump fortalecer la defensa aérea ucraniana.