El papa Francisco reapareció ayer en el balcón del hospital en el que se encuentra ingresado desde el pasado domingo luego de someterse a una operación de colon y llamó a mantener un sistema sanitario de calidad accesible y “gratuito” para todos.
“Me alegro de poder mantener la cita dominical con el Ángelus también en el policlínico Gemelli. Os agradezco, he sentido vuestra cercanía y el apoyo de vuestras oraciones. Gracias de corazón”, expresó el pontífice desde el balcón de la décima planta, en el que apareció con algunos niños enfermos, ante decenas de fieles que acudieron al lugar y que le recibieron entre aplausos.
Antes de rezar el Ángelus, repasó un pasaje del Evangelio que habla de la unción de enfermos por parte de Jesús de Nazaret.
En la mayor ofensiva aérea desde el inicio de la guerra, en febrero del 2022, las fuerzas de Rusia lanzaron más de 500 misiles y drones contra Kiev, la capital de Ucrania, dejando al menos 23 heridos y causando gran destrucción e incendios en zonas urbanas.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, informó que las explosiones provocaron incendios, daños materiales y la caída de fragmentos de proyectiles en múltiples zonas residenciales. Agregó que 15 de los heridos fueron hospitalizados y otros cinco reciben atención ambulatoria.
Según Timur Tkachenko, jefe de la Administración Militar de la Ciudad de Kiev (KMVA), al menos 13 puntos de los distritos de Solomyanskyi, Svyatoshynskyi, Darnytskyi, Dniprovskyi y Shevchenkivskyi resultaron afectados. Agregó que entre los heridos se encuentran hombres y mujeres de entre 25 y 57 años, con lesiones como politraumatismos, quemaduras y heridas cortantes.
El ataque comenzó hacia las 21:30 horas (local) del jueves, e incluyó el uso de drones Shahed y misiles balísticos. Las defensas aéreas ucranianas fueron activadas repetidamente durante la noche.
En el distrito de Solomyanskyi, se registraron incendios en techos de edificios y vehículos incendiados en patios residenciales. En Darnytskyi cayeron fragmentos de drones. Algunos restos fueron hallados cerca de instituciones educativas y viviendas.
Estos ataques se producen luego de informarse de una charla que sostuvieron los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump, de Rusia, Vladimir Putin. Ayer, el mandatario de Ucrania, Vladímir Zelensky, dijo haber acordado con Trump fortalecer la defensa aérea ucraniana.
WASHINGTON. Tras una nueva ola de bombardeos con drones y misiles contra territorio ucraniano, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció nuevas sanciones contra Rusia, y criticó a su mandatario, Vladimir Putin, con quien estaba en conversaciones para lograr la paz.
“Quiere ir hasta el final, simplemente seguir matando gente, no es bueno”, afirmó, en referencia al jefe del Kremlin. Detalló que, en la conversación telefónica con Putin, discutieron sobre posibles nuevas sanciones. “Él entiende lo que puede pasar”, aseguró Trump, en alusión a la posibilidad de nuevos castigos económicos para Moscú si persiste la ofensiva militar.
Horas después de la conversación, el Ejército ruso ejecutó un ataque aéreo de gran magnitud contra Ucrania. Moscú lanzó 550 drones y misiles, de los cuales 478 fueron interceptados, en una ofensiva que se extendió durante más de 11 horas.
La mayoría de los proyectiles se dirigieron contra Kiev, donde se escucharon explosiones en varios puntos de la ciudad y se reportaron impactos en al menos cinco distritos, señaló el jefe de la administración militar de la capital, Tymur Tkachenko, a través de Telegram. Como resultado de estos bombardeos, al menos una persona murió y 26 resultaron heridas en la capital.
Las explosiones causaron daños en viviendas y otras infraestructuras civiles. El presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, calificó el bombardeo como un “golpe demostrativamente significativo y cínico”.