El empresario colombiano Alex Saab, extraditado a Estados Unidos tras ser acusado de ser el testaferro del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, se negó a colaborar con la justicia norteamericana y se declaró inocente del delito que se le imputa.

A través de una carta, leída por su esposa, Camila Fabri, el allegado de Maduro afirmó que no tiene “nada que colaborar con Estados Unidos” ya que no ha “cometido ningún delito en Estados Unidos ni en ningún país”.

“No pienso mentir para favorecer a Estados Unidos en contra del que atraviesa un bloqueo inhumano (Venezuela)”, dice la carta leída por Fabri, quien aseguró que la había escrito él antes de ser extraditado.

En el texto, el empresario responsabilizó a Washington y a la oposición venezolana liderada por Juan Guaidó por su vida e integridad física. “Enfrentaré el juicio con total dignidad y haciendo valer mi inmunidad diplomática como servidor de Venezuela”, se lee y agrega que no es un “suicida”, dejando constancia de que, si le ocurre algo, será un asesinato. De otro lado, tras su detención, el presidente de Colombia, Iván Duque, afirmó que espera que el testimonio de Saab devele la “narcodictadura” de Maduro en Venezuela.

Como se sabe, el mandatario es uno de los principales críticos del chavismo y ha denunciado en repetidas ocasiones que el gobierno venezolano se sostiene con los dineros del narcotráfico, además de dar refugio a grupos irregulares.