Rusia podría recibir de su propia medicina. El gobierno de Ucrania aplicará la misma táctica que le permitió a la ex Unión Soviética en 1941, entonces gobernada por Joseph Stalin, derrotar a la Alemania nazi de Adolf Hitler, que avanzaba hacia Stalingrado con la finalidad de tomar el país. El presidente Volodímir Zelenski invocó a los ucranianos que aguanten el invierno porque, aunque “será difícil” a causa de la guerra y “por duro que sea”, les acerca “a la victoria”.
“Vale la pena percibir este invierno no como una prueba, sino como un tiempo, un tiempo que nos acerca a lo principal, a la victoria. Cada uno de estos 90 días de invierno”, señaló el mandatario.
Zelenski aseguró que los rusos esperan “usar el invierno” contra el pueblo ucraniano, hacer que “el invierno sea frío y las dificultades sean parte de su terror”. “Tenemos que hacer de todo para aguantar este invierno, por duro que sea. Y aguantaremos. Aguantar este invierno es defenderlo todo”, indicó.
Reconoció que Rusia “todavía tiene misiles y una ventaja en artillería”, pero los ucranianos cuentan con “algo que el ocupante no posee ni tendrá”: “Defendemos nuestro hogar, y eso nos da la motivación más fuerte posible. Luchamos por la libertad, y eso siempre multiplica cualquier fuerza. Defendemos la verdad, y esto une a todo el mundo en torno a Ucrania”.
Durante la Segunda Guerra Mundial, las huestes nazis avanzaban hacia Rusia, pero el duro invierno y la falta de alimentos fueron la causa principal de su derrota a manos de Stalin.
El Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos logró una alianza con el estado de Nebraska para ampliar el espacio de detención para “extranjeros criminales” detenidos por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Esta es la tercera alianza estatal que ICE logra luego de las prisiones de “Alligator Alcatraz” en Miami y “Speedway Slammer” en Indiana y la nueva instalación será apodada como “Cornhusker”.
En la mayor ofensiva aérea desde el inicio de la guerra, en febrero del 2022, las fuerzas de Rusia lanzaron más de 500 misiles y drones contra Kiev, la capital de Ucrania, dejando al menos 23 heridos y causando gran destrucción e incendios en zonas urbanas.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, informó que las explosiones provocaron incendios, daños materiales y la caída de fragmentos de proyectiles en múltiples zonas residenciales. Agregó que 15 de los heridos fueron hospitalizados y otros cinco reciben atención ambulatoria.
Según Timur Tkachenko, jefe de la Administración Militar de la Ciudad de Kiev (KMVA), al menos 13 puntos de los distritos de Solomyanskyi, Svyatoshynskyi, Darnytskyi, Dniprovskyi y Shevchenkivskyi resultaron afectados. Agregó que entre los heridos se encuentran hombres y mujeres de entre 25 y 57 años, con lesiones como politraumatismos, quemaduras y heridas cortantes.
El ataque comenzó hacia las 21:30 horas (local) del jueves, e incluyó el uso de drones Shahed y misiles balísticos. Las defensas aéreas ucranianas fueron activadas repetidamente durante la noche.
En el distrito de Solomyanskyi, se registraron incendios en techos de edificios y vehículos incendiados en patios residenciales. En Darnytskyi cayeron fragmentos de drones. Algunos restos fueron hallados cerca de instituciones educativas y viviendas.
Estos ataques se producen luego de informarse de una charla que sostuvieron los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump, de Rusia, Vladimir Putin. Ayer, el mandatario de Ucrania, Vladímir Zelensky, dijo haber acordado con Trump fortalecer la defensa aérea ucraniana.