El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, denunció que Estados Unidos ha iniciado una “guerra económica” contra Rusia. Esto, luego de que la Casa Blanca prohibiera las importaciones de los hidrocarburos rusos, y aplicara otras sanciones contra Moscú por su invasión en Ucrania.
“Estados Unidos declaró una guerra económica contra Rusia y está librando esta guerra”, sostuvo Peskov. “Moscú considerará seriamente la decisión de Estados Unidos de negarse a comprar portadores de energía rusos”, agregó.
En ese sentido, el jefe de prensa del Kremlin señaló que las autoridades están tomando medidas sistemáticas para estabilizar la situación económica en Rusia y evalúan una respuesta a las sanciones de Occidente. Con respecto a la venta de petróleo, Peskov comentó que “Rusia ha sido, es y será un proveedor fiable de energía” y señaló que los flujos energéticos continúan en Europa.