Un estudio internacional advierte que los peruanos padecen el peor estado de ánimo de Latinoamérica, alertan especialistas de salud mental del Instituto Guestalt de Lima (IGL) al encontrar que la cifra está muy por debajo del promedio global.

Así lo dio a conocer el psicólogo y psicoterapeuta, Manuel Saravia Oliver, director del IGL, al revisar los datos de la encuesta de casi 30.000 personas en 39 países a cargo de la consultora Voices y la Worldwide Independent Network of Market Research (WIN) difundido en el marco del Día Internacional de la Salud Mental.

En Perú, al igual que en Argentina, sólo el 68% evaluó que su estado anímico es bastante bueno o muy bueno, una cifra que está muy por debajo del promedio global pero también de lo que respondieron en otros países de América Latina. En Paraguay el 95% dijo que su estado de ánimo es positivo, mientras que el 87% lo contestaron en Brasil, México y Chile. En Ecuador fue el 69%, sólo un punto porcentual por encima de Perú y Argentina.

“Los datos de este estudio son muy valiosos porque reflejan una preocupante realidad sobre la salud mental de los peruanos luego de tres años de pandemia y con las secuelas que ya conocemos. Como sociedad cada día nos enfrentamos a una incansable y sostenida convulsión social debido a la inseguridad ciudadana, los problemas económicos, la corrupción y la inestabilidad social y económica”, advirtió Saravia.

Cuidado con el estrés

Cada día es más común ver a personas con nerviosismo y cierta tensión emocional, que se reflejan en problemas físicos como dolores de cabeza, espalda, dolencias de digestión como la gastritis, insomnio, ansiedad, e irritabilidad.

El estrés no es una enfermedad, pero puede tornarse en un trastorno mental cuando la persona estresada empieza a desarrollar cuadros de ansiedad y de depresión.

Al respecto, el especialista advirtió que estos cuadros pueden complicarse con cambios de comportamiento como sobrealimentación o inapetencia, mayor consumo de alcohol o drogas, aumento del tabaquismo, rendimiento deficiente en el trabajo, entre otros cambios que en estos casos, es necesario acudir por ayuda especializada.

Recomendaciones

Saravia aconsejó a la población que tiene episodios de estrés considerar los factores de protección como parte de un estilo de vida. Por ejemplo, practicar técnicas de respiración, caminatas al aire libre, ejercicios físicos, participar en reuniones en familia y con amigos, tener sueño profundo y reparador y alimentación saludable.