El Gobierno de Guillermo Lasso y los líderes indígenas de Ecuador firmaron en Quito, con mediación de la Iglesia católica, un acta de compromisos que puso fin a 18 días de protestas por el alto costo de vida y que dejaron seis fallecidos, entre ellos un militar, así como unos 500 heridos entre manifestantes y fuerzas de seguridad.

El Acta de la Paz, que incluye “el cese de las movilizaciones y el regreso paulatino (de los manifestantes) a los territorios” de donde son originarios, fue suscrita por el presidente de la poderosa Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie), Leonidas Iza, y el ministro de Gobierno, Francisco Jiménez.

“De acuerdo al acta que hemos firmado, vamos a suspender esta medida de hecho”, expresó Iza, confirmando la terminación de las protestas con bloqueo de carreteras a nivel nacional, las más largas de las protagonizadas por la Conaie.

En el acuerdo se considera la disminución de precio de combustible, más inversión en salud, educación y agro, menos explotación minera y condonación de deudas.